ARTÍCULO DE OPINIÓN
Era el día del cine español, de sus máximos responsables y defensores en un mundo donde cada vez es más difícil hacer una película. Pero un lugar donde rebosaba ilusión, nervios y un sin fin de emociones, todos estaban expectantes por el desarrollo de la gala y ver quien se llevaría el premio y quien volvería casa sin nada.
No hubo sorpresas en los premios, fue una entrega donde se repartió mucho los galardones. Las estatuillas mas cotizadas fueron a dos largometrajes bien distintos. El Premio a la Mejor Película se lo llevo: "Tarde para la ira" y el galardón al Mejor Director se lo llevo J. Antonio Bayona por: "Un monstruo viene a verme".
En esta 31 edición la novedad fue la orquesta que acompaño a cada momento la gala, quizás se abuso de ello, pero ayudo a dar vida a una ceremonia que suele hacerse muy larga sobretodo a los nonimados.
La noche del cine español tuvo de director al actor Dani Rovira quien volvió a repetir en su papel de anfitrión. Dando humor y espectáculo a la gala, buscado entretener y concienciar a partes iguales. Entre bailes y bromas, la noche paso sin mucha novedad y sorpresa.
Ana Belén se llevo el Goya de honor y aprovecho para reivindicar que se otorguen mas papeles a las mujeres en el cine. Además la actriz aprovecho a dar las gracias a todos los que le han apoyado durante su larga carrera.
Fue una noche donde las estrellas brillador y se lucieron, donde ocurrió tal y cual anécdota, y donde de se reunieron lo mejor, de lo mejor del cine español.